Mentidero de culturas asomado a la Bahía

Dar un paseo por las calles del barrio del Mentidero de Cádiz supone un cúmulo de contrastes debido a la diversidad de gentes que se observan. A los vecinos del propio barrio se suman los jóvenes universitarios, de entre los que hay que destacar a los estudiantes extranjeros que ambientan las calles del barrio con lenguas cada vez menos extrañas, junto a los profesores de las facultades y algún turista que hace su ruta por la ciudad.
Además es uno de los barrios más completos de Cádiz. En su conjunto alberga dos teatros, el Falla y el Pemán; la Casa de la Cultura, el baluarte de la Candelaria, la Escuela de Hostelería, una escuela de idiomas, el club de Tenis, la primera facultad de Medicina de España, la facultad de Filosofía y Letras y aularios universitarios, un pabellón polideportivo y la zona verde más verde y amplia de Cádiz: el parque Genovés. Todo al abrigo de uno de los paseos más gaditanos y significativos, la Alameda Apodaca.

Entre los muchos conocedores del barrio se encuentra Juan Chicón, que regenta desde 1998 el café bar Serrallo y se encuentra en la misma plaza del Mentidero haciendo esquina con Bendición de Dios. Lleva trabajando en la hostelería dentro del barrio del Mentidero desde 1982, cuando vino por unas vacaciones desde El Burgo, junto a Ronda, y ya van para treinta años. Desde chaval ha ido viendo los cambios que ha sufrido el barrio y cuenta que a principios de los ochenta “había muy mal ambiente, era una pequeña ciudad sin ley que ha ido mejorando”.
Los negocios de hostelería han aumentado en estos años, proporcionando mucho más movimiento y vida. Esto se puede comprobar tan sólo en la plaza del Mentidero con las numerosas terrazas que tiene. Para Juan Chicón, “ahora hay más trabajo que antes y se nota”. Sólo le faltan dos cosas en este momento, que “se termine la obra del aparcamiento de Santa Bárbara y que le metan mano al Pemán, que atraía a mucho público”. Igualmente el dueño del Serrallo también recuerda y echa de menos la presencia de la redacción y los talleres de Diario de Cádiz en sus calles “porque era un punto de referencia”.
Tanto el aparcamiento subterráneo de Santa Bárbara como la remodelación del teatro Pemán son obras clave para el desarrollo del barrio. Santa Bárbara ya vislumbra su apertura para comienzos de 2011, aportando un balón de oxígeno a los residentes y visitantes de la zona a la hora de buscar aparcamiento. Por su parte, el teatro de verano José María Pemán va a comenzar en breve los trámites para su transformación. La propia alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez ha anunciado que en este mes de septiembre se licitará la obra con el objetivo de terminarla en 2012, para cubrir las necesidades del Bicentenario.
Aprovechando la mañana mientras da un paseo con sus nietas por las calles del barrio se encuentra Antonio Castellano. Este vecino ha sido hijo de panadero y panadero toda su vida. Hasta hace pocas semanas mantenía abierta uno de los hornos más tradicionales de Cádiz, la panadería de la Torre, en la calle del mismo nombre. Antonio Castellano, ya apunto de jubilarse, recuerda como antes “en el barrio se vivía de los militares con la caja de reclutas, Artillería 4 e Intendencia” y reconoce que “ha cambiado como todos los barrios”. Pero, alguna de las cosas que ha visto cambiar y no para bien, como explica, son que “el comercio chico se ha ido extinguiendo y también la pérdida de población del barrio hacia otras zonas de la ciudad que le daba mucha vida”.
Pese a mostrar su satisfacción por la paulatina evolución del barrio en las últimas décadas, los miembros de la junta directiva de la asociación de vecinos del Carmen del barrio del Mentidero demuestran su malestar por algunos aspectos que quedan por solucionar en sus calles. Blanca Marzán es su presidenta desde hace casi tres años y reclama la mejora del pabellón Polideportivo del que denuncian “filtraciones de agua en la sala de musculación con el peligro de coger algunas de las máquinas” conectadas a la red eléctrica. Además los miembros de la asociación reclaman que “no se pueda jugar al baloncesto porque las canastas quedan sobre las gradas que son móviles y no hay personal para retirarlas”. En este tema concluye Marzán que “después del trabajo que ha costado el pabellón es lamentable la manera como lo han terminado”.
Otras de las reivindicaciones que tienen es la de una sede nueva y más grande para la asociación. Según su presidenta, “el local actual resulta pequeño para hacer actividades y tenemos que andar pidiendo ayuda a otras asociaciones”. También se muestra preocupada Blanca Marzán por las plazas reservadas para los vecinos del barrio en el nuevo aparcamiento de Santa Bárbara. Marzán comenta que “tienen seiscientas solicitudes para doscientas plazas que hay a disposición del barrio”. El mal estado del enlosado del paseo de la Alameda y de la acera externa del parque Genovés también entra dentro del malestar de la asociación y proponen que se ponga en uso el paseo superior del baluarte de la Candelaria como un mirador de la Bahía.
Desde la asociación de vecinos del Carmen también muestran su interés por los aspectos sociales y de vivienda de sus vecinos. Por eso han contabilizado el número de fincas cerradas existentes en el barrio que estiman alrededor de la quincena. Este aspecto ya lo han denunciado por “la inseguridad que supone su descuido y el peligro de caída de cascotes”. Además se preocupan de mediar con las asistencias sociales para las familias con menos recursos. Uno de los aspectos que han trabajado en el último año es el de la alfabetización. Blanca Marzán se sorprende de que “aún quedarán personas mayores que no supieran leer y que desconocían lo firmado en sus contratos de alquiler”. Así, decidieron crear un aula para dotar a estas personas de un mínimo de conocimientos. El resultado, según cuenta, “fue que no hemos podido parar las clases en verano por exigencias de los alumnos y ahora también exigen ampliar sus conocimientos en otras materias”.
Pero, si algo caracteriza al Mentidero es la intensa vida cultural que se mantiene por sus calles. Los propios hosteleros de la zona reconocen que sus beneficios incrementan o disminuyen en función de la calidad de las actuaciones que se traen al teatro Falla. La Universidad de Cádiz tiene mucho que decir al respecto. Una de las facultades es la de Filosofía y Letras, su decano es Manuel Arcila y piensa que “es verdad que las facultades de la UCA le dan bastante vida al barrio”. Además, continúa Arcila, “los estudiantes alquilan pisos, compran en los establecimientos, salen por la noche y hacen de portavoces del clima y de Cádiz”. El decano de Filosofía y Letras reconoce que “aunque las relaciones con el barrio son buenas se debería aprovechar más lo que significa el frente universitario de la ciudad, debe convertirse en la referencia cultural de Cádiz pero hay que mejorar el tema del aparcamiento, algo que es negativo para los universitarios”. De la misma manera, le gustaría disponer de unos transportes públicos adecuado que una esta zona con el espacio intermodal de la plaza de Sevilla. Respecto otras carencias que pueda tener el Mentidero, Manuel Arcila insiste en que “ampliaría un poco más la oferta comercial para los estudiantes y para eso habría que analizar el tipo de demanda de los alumnos”.
En el propio barrio del Mentidero también se han vivido algunos de los capítulos de la proclamación de la Constitución de 1812. En la plaza del Mentidero se leyó por segunda vez el texto constitucional. La plaza de San Antonio fue testigo, a continuación, de la tercera proclamación pública y en la iglesia del Carmen se celebró el acto litúrgico de acción de gracias tras la elaboración de la Pepa. La asociación de vecinos, según informa, va a preparar su aportación a la celebración. Un barrio que desde su interior se ve como un referente cultural para Cádiz y que, como indica el decano de Filosofía y Letras, Manuel Arcila, “desde el punto de vista cultural y social deberíamos incentivar las relaciones entre nosotros”.

Fuente: Mentidero de culturas asomado a la Bahía « Natanael Bello. Blog